La Elevación de Senos o Mastopexia es una intervención quirúrgica destinada a mejorar la apariencia de los senos cuando estos han perdido volumen y se encuentran flácidos y caídos, esto se realiza por diferentes motivos:
- Para mejorar el contorno corporal de la mujer.
- Para corregir una perdida en el volumen mamario después de un embarazo o pérdida de peso.
- Por efecto de la gravedad, de la edad o por causas hereditarias los senos pueden verse caídos.
- Para equilibrar la forma de las mamas, cuando existe una diferencia significativa entre ellas.
La forma y el tamaño de las mamas antes de la cirugía pueden influir tanto en el tratamiento recomendado como en el resultado final.
Esta intervención no cambia el tamaño de los senos, solo los eleva, también puede logarse una reducción en el tamaño de las aréolas y pezón si esto se desea. Si usted desea más volumen la cirugía puede acompañarse de una colocación de prótesis de silicón (véase aumento de busto).
Existen tres formas diferentes de realizar las incisiones de la cirugía dependiendo de la necesidad de cada paciente:
Alrededor de la areolaAlrededor de la areola y otra vertical hasta el pliegue inframamarioAreola, vertical y surco inframamario.
La intervención consiste en restaurar la situación de las mamas con respecto al tórax, movilizando el tejido mamario hacia arriba, esto se consigue eliminando el exceso de piel para acomodar el tejido y logar una mejor forma y contorno mamario. La cirugía se puede realizar con anestesia regional y sedación que es lo mas frecuente, o rara vez con anestesia general y es en la mayoría de los casos de carácter ambulatorio. En raras ocasiones se puede requerir la utilización de drenajes. El dolor postoperatorio es mínimo. La recuperación es de una semana generalmente, para regresar a actividades cotidianas y de un mes para volver a hacer ejercicio.
Cualquier procedimiento quirúrgico entraña un cierto grado de riesgo y es importante que sean comprendidos. La decisión individual de someterse a una intervención quirúrgica se basa en la comparación del riesgo con el beneficio personal.
Aunque la mayoría de las pacientes no experimentan complicaciones, deberás discutir cada una de ellas con tu cirujano plástico para asegurarte de que comprendes los riesgos, complicaciones potenciales y consecuencias de la mastopexia. Es poco frecuente pero puede haber mala cicatrización, infección, acúmulo de líquido o sangre debajo de la piel, alteración o pérdida permanente de la sensibilidad, necrosis o pérdida de piel o arélolas.
La cirugía se puede realizar desde los 16 o 17 años de edad y no hay problema alguno con la lactancia materna, muchas pacientes operadas dan seno materno a sus hijos con toda naturalidad y sin riesgos tampoco para el bebé.
Antes de la cirugía se debe tener una consulta donde se le revisa, se le dan todas las explicaciones, y se solicitan exámenes de sangre.